Hoy tenía un día de "inspiración panaderil"; bueno, no ha sido fruto de la improvisación, si no más bien con premeditación y alevosía jajajaja! Me explico:
Para hacer las dos recetas que he elaborado hoy, tenía que alimentar por varios días mi masa madre; además, preparar las masas el día anterior al horneado...
Hace un par de semanas que haciendo la compra habitual en Alcampo, me "topé" con un paquete de harina de espelta integral ecológica. No lo dudé, lo puse en mi carro de la compra, porque estaba segura que le daría salida.
He encontrado muchas recetas para hacer pan con esta harina, pero sin duda, la que mas se adaptaba a lo que estaba buscando, fue la que encontré en el blog de Uno de dos; un blog precioso y lleno de recetas interesantes y buenas, además de tener unas fotografías excelentes, no dejéis de visitarlo, merece la pena...
Utilicé la panificadora para amasar; amasó hasta que conseguir pasar la prueba de la membrana. En la receta original, la elaboración es mucho mas artesanal, así que estoy segura que el resultado será mucho mejor pues este tipo de masas agradecen el mimo y "el trato especial".
PAN DE ESPELTA INTEGRAL CON MASA MADRE
Ingredientes:
250 gr. de harina de fuerza
250 gr. de harina integral de espelta ecológica
300 ml de agua
10 ml de aceite de oliva virgen extra
10 gr. de sal
5 gr. de azúcar
200 gr. de masa madre natural al 100% de hidratación
2 gr. de levadura seca de panadería*
*La levadura seca sólo se la añado en días fríos como los que están haciendo. Ayuda a la masa madre a activarse mejor y a que los levados no sean excesivamente lentos. Aún así, son muchas horas de fermentación y paciencia...
Elaboración:
Unos días antes, alimento mi masa madre varias veces para que pierda acidez y tenga mas fuerza para la fermentación posterior.
El día anterior, elaboro la masa; bueno, lo hizo mi panificadora, ya sabéis primero los líquidos, luego las harinas y la masa madre. Programa solo amasado; aunque si creo conveniente, vuelvo a programarlo una vez finaliza el primer programa, hasta conseguir una masa muy suave y elástica. Hago la prueba de la membrana; cojo una porción de masa y la estiro entre mis dedos, ha de quedarse una especie de membrana que deje pasar la luz sin que se rompa. Este es el punto donde dejamos de amasar.
Pongo la masa en un bol aceitado y tapada con film. Lo dejamos levar durante toda la noche; si hace mucho frío, no es necesario meterla en la nevera. Por la mañana, si ha estado en la nevera, la saco un par de horas antes para que se atempere.
Divido la masa en dos, una mas grande que la otra; boleo y formo las barras. Las pongo en molde de pírex con papel de horno en la base y hago unos cortes transversales con una cuchilla, espolvoreo con harina y dejo levar de nuevo.
Cuando haya doblado de volumen meter en el horno pre calentado a 200º, calor arriba y abajo. Hornear 25 minutos; luego quitar las tapas y seguir con el horneado otros 20-30 minutos más; esto ya depende de los hornos y del grado de tostado que queramos. Sabremos que el pan está bien cocido cuando al darle unos golpecitos por debajo, el sonido sea seco.
Terminada la cocción, sacamos a una rejilla y dejamos enfriar.
Es conveniente dejar que se enfríe totalmente antes de cortar. Incluso mejor de un día para otro, aunque yo no he sido capaz de esperar...
Mirad qué miga...que pedazo de tostadas me esperan mañana!