GALLETAS DE AVENA Y MANZANA

 

 

Hace días que ando dando buscando la forma de intentar hacer unas galletas algo más ligeras de las que solemos tomar habitualmente. La comida sana no tiene porqué estar reñida con el placer de un buen bocado, pero claro, lógicamente son sabores distintos,pero no por ello, menos buenos...

 

Me puse a experimentar,  una receta de aquí, otra de allá, unos pequeños "tuneos" cosecha propia, y estas galletas fueron el resultado. Bueno, yo diría que son una mezcla entre bizcochitos y galletas porque templadas, quedan crujientes, pero cuando enfrían, su textura se vuelve "abizcochada".

Antes de empezar, quiero deciros que no son las típicas galletas que te enganchan al primer bocado, para ser sincera, la primera galleta, no me pareció gran cosa, pero empiezas a notar el regustillo a manzana y canela y cojes la segunda....

 

GALLETAS DE AVENA Y MANZANA

Ingredientes:

200 grs. de harina integral ecológica (en herbolarios)

200 grs. de copos de avena suave (en herbolarios)

1 sobre de levadura Royal 

6 cucharadas soperas de aceite de oliva suave

6 cucharadas de leche de soja (o de avena, almendras) 

1 cucharadita de canela molida 

Una manzana 

100 grs. de azúcar moscovado

Una cucharada sopera de melaza de caña 

Una pizca de sal 

25 grs. de pasas (no las puse, pero lo recomiendo) 

30 grs. de pepitas de calabaza ecológicas

30 grs. de pepitas de girasol ecológicas

20 grs. de semillas de sésamo ecológicas 

2 huevos medianos de gallinas de corral (regalo de mi amiga Toñi, gracias)

 

Preparación:

Precalentar el horno 180º

En un molinillo o en la Thermomix, triturar las semillas unos segundos, (tiene que quedar trocitos) Reservar.
Pelamos la manzana y la machacamos bien con un tenedor.

Ponemos en un bol la manzana triturada, al leche, el aceite, los huevos batidos, el azúcar y la canela.

Añadimos la harina tamizada junto con la levadura y el resto de ingredientes secos. Mezclamos bien. Nos quedará una pasta densa pero pegajosa.

Preparamos las bandejas del horno con papel de hornear. Con las manos aceitadas, vamos poniendo pegotitos de unos 25- 30grs. sobre la bandeja, dejando espacio entre cada galleta. Aplastamos con los dedos y con un tenedor las marcamos primero en horizontal y luego en vertical.

Horneamos unos 20 minutos, (depende de cada horno) o hasta que veamos los bordes dorados. Las dejamos unos minutos en la bandeja y luego las pasamos a una rejilla para que terminen de enfriar.

NOTA:

Como os he comentado más arriba, no son las típicas galletas de mantequilla, al enfriar, quedan blanditas. No son una exquisitez pues he intentado quitar todas las calorías posibles y he metido bastante fibra, pero una vez las pruebas, les cojes el "gustillo".....

Lo que si os recomiendo es que si podéis, le pongáis las pasas, yo no le puse porque a mi hija no le gustan, pero creo que las pasas le tienen que dar el puntillo dulzón que les falta.